Después de varias denuncias en redes sociales, la prensa nacional alertó sobre una modalidad de estafa telefónica que ha proliferado en Cuba y que involucra un supuesto mensaje de Cubacel.

El saldo del teléfono móvil es un bien preciado entre los cubanos, se puede canjear gracias a la opción de transferencia como si se tratase de una operación bancaria, y por ende, es centro de atención de habilidosos estafadores.

Hacer una transferencia a un número equivocado puede ser algo muy delicado y hasta objeto de conflicto. Por eso la nueva modalidad de estafa alude a un error de transferencia que conlleva una devolución. Muchos ni se dan cuenta de la estafa, sobre todo porque implicaba un supuesto mensaje de Cubacel, el departamento de la Empresa de Telecomunicaciones de Cuba (ETECSA) que gestiona la telefonía móvil en la isla.

Aunque la estafa había sido denunciada en redes sociales, este 5 de agosto la prensa nacional alertó con detalles sobre el proceder de estos delincuentes por la magnitud de los hechos. No han sido pocos los incautos que han accedido a devolver dinero que supuestamente le enviaron por error.

Cuando un cubano recibe una transferencia de saldo, el aviso se hace a través de un mensaje de Cubacel, que describe el monto transferido y el número del solicitante, pero para ello es necesario que ambos usuarios tengan activada esta opción en sus líneas móviles, de lo contrario es imposible hacer efectivo el traspaso.

En la estafa, un detalle a tener en cuenta es que el mensaje en realidad no viene Cubacel, como se anuncia en el mensaje sino del mismo número del estafador que con antelación pidió la devolución del dinero.  

Este tipo de estafa ha cobrado diferentes formas pero sólo una singularidad la hace peligrosa: los autores pueden ser vecinos o estar a cientos de kilómetros de la víctima, explicó Cubadebate.

La ley No. 62 Código Penal contempla sanciones contra quienes incurren en el delito de estafa, que van desde tres meses hasta diez años de privación de libertad y multas de varias cuantías.

Fuente: sputnik